- Espero no haberlos metido en mayores problemas con el teletransporte. - Dijo el administrador.
- Pero... Acaso no sabes con seguridad adónde los llevaste?
- Sé que están en Japón, pero no sé en qué punto.
Veamos pues ese punto donde han acabado nuestros cuatro aventureros.
- Dónde nos han llevado? - Preguntó Lucas.
- Pues a Japón, imbécil. - Contestó Paulina, que se había hecho daño al caer.
- Y ahora cómo hacemos para explicarle a quien vive en esta casa por qué estamos aquí? - Preguntó Edward.
Alguien apareció por la puerta de la habitación. En cuanto encontró a los cuatro, chilló con fuerza:
- Mizore!!!!!
Apareció al momento una chica mayor que la niña y con cabellos morados.
- Qué!? Quietos!
Con un movimiento de ambas manos, hizo que las piernas de los cuatro quedaran congeladas, cubiertas sólidamente de hielo.
- C-cómo!? - Exclamó Lucas.
- No hagáis nada! - Ordenó Zero.
- Quiénes sois? - Preguntó la chica de pelo morado.
- Somos de España. Estamos aquí porque queremos llegar al palacio y hablar con quien manda el país. - Contestó Edward.
- Como sabrán, no suelo confiar en extraños como ustedes. - Decía la chica - Más razón si tengo que proteger a la niña. Así que...
- Una pregunta, por favor? - Interrumpió Zero - Cuál es tu nivel de magia?
- 34, por qué lo preguntas?
- Porque yo tengo el 42.
- Eh!? Entonces serías capaz de romper el hielo que he invocado!
- Puedo. Pero asegúranos que nos dejarás salir de aquí.
- Demuéstrame tus poderes. Hatsu! Vete de aquí! Puedes resultar herida!
La niña salió corriendo de la puerta. Zero inmediatamente rompió sus ataduras y lanzó una lanza de hielo a la chica. Ella se cubrió con un muro de hielo y la lanza lo rompió sin esfuerzo, pero no hirió a la chica.
- Se puede decir que ha roto el hielo, no? - Rió Lucas.
- Cómo te llamas? - Preguntó la chica.
- Zerofrost. Y tú?
- Pueden llamarme Mizore.
- Bueno, y si nos sacan de aquí? Cuanto antes lleguemos mejor. - Dijo Edward.
Mizore removió el hielo que atrapó los pies del grupo y los dejó marchar. Incluso les indicó cómo llegar hasta el palacio. En cuanto salieron por la puerta se dieron cuenta de una cosa:
- Oye, Zero dónde está? - Preguntó Lucas.
- Supongo que se habrá quedado con la chica de hielo. - Contestó Edward.
- Pues a mí me sorprendió cómo iba vestida. Esos calcetines a rayas blancas y moradas, la camiseta blanca, todo blanco y morado! - Decía Paulina.
Directos al palacio Edward, Lucas y Paulina. Mientras tanto, Zero se había quedado con Mizore y la niña en su refugio.
- Cómo se llama ella?
- ...
- No me lo quieres decir?
- Si te digo su nombre la reconocerás enseguida. Eso es lo que no quiero.
- Ah. Un segundo...
Zero recordó las palabras que dijo antes Mizore durante el combate.
"- Hatsu! Vete de aquí!"
- No es posible. Yo sé quién es esta niña. Acaso es Hatsune Miku? En serio?
- Sí. - Contestó la niña - Soy yo.
- La tengo escondida aquí. Si descubren que ella está por aquí se la pueden llevar fácilmente, así que estamos ocultas en nuestro refugio.
- Así que es eso... Bien, pues yo debo irme ya. Gracias por todo, Mizore.
- Gracias a ti, Zero. Oye...
- Sí?
Miku comenzó a cantar una canción de letra japonesa. Mizore enrojeció.
- Qué está cantando?
- Una... Una canción que trata sobre el amor a primera vista...
Mizore se levantó y salió del refugio rápidamente. Necesitaba coger un poco de aire. Zerofrost había comprendido lo que ocurrió y quedó estupefacto. Sin decir nada más y haciéndole un gesto a la cantante, salió también. La chica estaba fuera, apoyada en una valla, respirando hondo. Zero se quedó a su lado, y hubo un largo silencio.
Sin ninguna razón aparente, Mizore creó un bloque de hielo con su mano y lo rompió poco después.
- Creo que ahora sí que estoy lista... Para romper el hielo. - Dijo ella sin mirar siquiera los ojos de Zero.
- Así que es eso...
Zero pensaba que estaba soñando. La mujer de hielo y el hombre de hielo. Ambos se encuentran y surge el flechazo. Parecía una película. Pero eso era real, y la mano que tocó Zerofrost con su mano izquierda también era verdadera.
- Tienes que ir con ellos, verdad? - Preguntó Mizore.
- No me importaría quedarme un rato más aquí. Estoy en Japón, mi sueño. Y parece que tú también estás en ese sueño.
- Pues entonces iremos nosotras. Seguro que quieres perseguir tu sueño, verdad? Pues adelante. Hatsu! Vamos a salir! Date prisa en prepararte!
Mientras todo esto ocurría en casa, los otros tres ya habían entrado en el palacio.
- Pero esa no es... - Susurraba Lucas a Edward.
- Lin! - Exclamó el viejo.
Hasta el próximo episodio! Estoy aprendiendo a dejar finales con suspense, así que... Aguantad! El episodio finale de WBG será la próxima semana! Espero que lo disfruten tanto como yo lo hago escribiendo! Buena semana para todos!
No hay comentarios:
Publicar un comentario