viernes, 30 de mayo de 2014

WBG: India y huida de la "cárcel"

Una llegada un poco... ajetreada. En cuanto desembarcaron, todo parecía normal. Gente de puerto, con su pesca, con sus barcos, la ciudad de Bombay un poco más allá... Pero en cuanto dejaron el barco, una patrulla comenzó a gritar y a correr hacia los tripulantes. No se esperaban semejante atropello, con lo que los pilló de improviso y fueron atrapados por las fuerzas Indias, que los inmovilizaron rápidamente y los llevaron al cuartel de policía. Ellos todavía no sabían por qué los detenían. Cuando los interrogaron, se dieron cuenta de todo.

- Así que no podíamos desembarcar sin permiso de los ingleses... vamos, eso es lo que dice - Intentaba traducir Edward.
- Pero bueno! Y no nos avisan antes de esto? - Se quejaba Lucas.
- Igual ha sido mientras viajábamos, infeliz - Respondió Paulina.
- Y cómo salimos ahora? - Preguntaba Zero, mientras los policías se llevaban al grupo a las celdas.

Las celdas tenían tres pisos. No era difícil orientarse, puesto que desde una planta se podían ver el resto. Habían acabado de la siguiente manera: Edward en la primera planta, Zero en la segunda y Lucas en la tercera. Paulina estaba en otra cadena de celdas, destinadas a mujeres. Esa sección estaba separada de la otra por una puerta bien blindada. Esa sería la parte más difícil del plan de Edward para salir de cárcel. La suerte tendría que estar del lado del viejo para conseguir salir de la prisión con todos los miembros y escapar de la ciudad. Edward comienza a sacar su potencial con sus cartas.

Esto funcionaba así: Edward tiene su baraja de cartas. Cada carta tiene un poder especial para que el viejo lo utilice. Estos poderes son potentes, pero tienen una contraparte. Las cartas son elegidas aleatoriamente. Nunca se sabe lo que va a tocar, con lo que puede salir algo útil, o algo poco útil. Edward simplemente se la juega a la suerte.

(Las cartas tienen habilidades extraídas del videojuego League of Legends, así que no me pertenecen. Pertenecen a Riot Games. También pertenecerán a otro juego, pero eso lo diré cuando toque, para no adelantar acontecimientos.)

Edward sacó su primera carta. Qué sería? Ahora lo vemos en la siguiente línea.

"Camino Roto: Teletransporta al usuario a una ubicación cercana utilizando energía del vacío."

- En serio he tenido tal suerte? Bueno, esperaré a que el vigilante se vaya. Así tendré tiempo para sacar otra carta. Espero que sirva para eliminar al guardia... - Pensó Edward.

El momento llegó y Edward utilizó la carta. En cuanto salió de la celda sin abrir la puerta de barrotes el guardia vio lo que ocurría y corrió hacia el viejo dando la voz de alarma. Edward sacó rápidamente su siguiente carta. Impresionado, la usó sin mayor demora. La carta se llamaba: "Paseo Sombrío"

"Paseo Sombrío: El usuario se vuelve invisible hasta el uso de la siguiente carta."

Edward desapareció ante los ojos incrédulos del guardia. Ahora tenía que ser cauteloso y no revelar su posición. Edward iba a empezar por liberar a Lucas, que estaba en la tercera planta y tras eso sólo habría que bajar mientras se liberaban uno por uno los presos bajando las escaleras. Los vigilantes no podrán hacer nada contra los reclusos si estos van en estampida. Subiendo en modo invisible y con mucho sigilo, aprovechó Edward la distracción de un guarda para robarle las llaves sin que se diera cuenta. Consiguió abrir la celda de Lucas y dos más antes de que los vigilantes vieran la apertura misteriosa de las puertas. Los reclusos salieron como locos arrasando con todos los seguratas y mientras tanto Edward abría todas las celdas posibles. Los guardias no daban abasto entre tanta confusión, pues la revuelta en las celdas de las mujeres tampoco era menor.

Paulina había conseguido librarse de sus ataduras antes de entrar en la celda y pateó el trasero del que la retenía. Con eso, comenzó la revuelta entre las mujeres antes que entre los hombres. Toda esta huida bulliciosa tenía un punto de reunión. La puerta blindada que dividía los sectores femenino y masculino. Los golpes desde los dos lados al muro que separaba al grupo, acabaron dando sus frutos e hicieron ceder la puerta. Ambos bandos estaban en una gran confusión e incluso hubieron peleas. El grupo de Lucas, Edward, Zero y Paulina salieron por patas de allí y corrieron hasta el lugar donde no podrían ser detectados fácilmente. Allí podrían organizarse y planear sus siguientes movimientos. Fueron a la espesa vegetación de la jungla.

Hasta el siguiente episodio no habrá noticias de nuestros aventureros. Hasta entonces!

WBG: Mar Rojo, Océano Índico e historia de Paulina

Ya en el barco, cruzando el canal de Suez, quedaba un viaje aún más largo que el anterior por mar. Puedo adelantar que solo tuvieron un contratiempo durante la travesía. Una tormenta que estuvo a punto de volcar el navío, sin conseguirlo, afortunadamente. Pero antes de eso...

- Voy a descansar un rato. Llevo bastante tiempo haciendo cartas. A este ritmo acabo todas antes de llegar a India - Dijo Edward, saliendo del camarote.
- Y siempre tienes que venir aquí? - Preguntaba Paulina, que no estaba de muy buen humor.
- Vaya. Tienes la regla o qué? No te veo muy contenta de haber conseguido una espada gratis. Encima habla! - Reía Lucas, que se había plantado cerca de Paulina.
- Vete a hacer otra cosa si no quieres que te de un guantazo, quieres?
- Deja a la chica, Lucas. Dale un respiro - Edward intentaba calmar el ambiente.
- Oye, hacemos algo más aparte de discutir? Me aburro - Llegó Zerofrost.
- Yo también, por eso he venido aquí - Dijo Lucas.
- Oye, Paulina. Por qué no nos cuentas algo sobre ti? - Preguntó Edward.
- Cómo que algo sobre mí? No entiendo.
- Ah! Que nos cuente su historia, verdad? Eso es lo que hacíamos cuando estaba Lin - Recordó Zerofrost.
- Lin? - Paulina no sabía donde meterse ni de qué estaban hablando.
- Bueno, dejadla que piense. Que comience cuando quiera. - Terminó Zerofrost.

Paulina se lo pensó mientras miraba al cielo despejado. Sin previo aviso, ya que todos estaban relativamente cerca de Paulina, esta comenzó su relato.

- Soy Paulina Gao y soy la segunda mayor de 11 hermanos y hermanas. Nací en...
- Once hermanos!? Pero en qué pensaron tus padres? - Interrumpió Lucas.
- No interrumpas... - Dijo Edward.
- Continúa - Sentenció Zerofrost.
- Bien. Yo tuve que irme de casa enviada por mis padres a servir a un rico. Yo todavía era muy joven para hacer algo útil y simplemente intentaba escaquearme de todos los problemas que pudiera causar. No sabía hacer casi nada. A fuerza de observar aprendí. Cómo conseguí la libertad? El viejo que me mandaba se hartó de mí y me devolvió con mis padres. Finalmente, acabé por interesarme en la profesión de mis progenitores y sé algo de medicina o cosas parecidas. En fin, ahora he acabado jugando a esto y tengo que aguantaros a todos vosotros. Eso es suficiente?
- Sí. Es suficiente. Gracias. Vuelvo a mi trabajo - Dijo Edward mientras se metía en su camarote de nuevo.
- Qué aburrimiento. Ya verás cuando te cuente mi historia - Bostezaba Lucas Tefd.

Zerofrost no dijo nada y se fue a otra parte del barco. Lucas intentó buscar algún entretenimiento para el viaje que quedaba. Paulina simplemente descansó tras tanto ajetreo en Egipto. Volvería con energías renovadas para cruzar India y China. Pero eso será en los próximos episodios. Hasta entonces!

martes, 27 de mayo de 2014

Extra: Leigh, la maravilla americana.

Leigh. An Edward Yolag's story.

(Yo quería dejar algo para la ayudante americana que nos ha estado acompañando en algunas clases este año y se me ha ocurrido escribir una de mis historietas en inglés. Este sábado tendréis episodio en castellano, no os preocupéis, pero por el momento, esto es un extra. Si no entiendes inglés lo siento. Puedes usar un traductor, pero no es exacto y conlleva bastante tiempo... Creo. De todos modos, gracias por seguir viendo mis historias aleatorias. Hasta otra! Puede que incluso traduzca esto cuando tenga tiempo. Quién sabe.)

(First of all, my friends told me that I'm pretty good at writing fantasy stories. I even started a blog where i post some of them. Now, Leigh is leaving, and I wanted to try to write a story in english. Maybe my writing is not that perfect, but I'm trying, as I said before. This would have been part of a series if I had written already all the story that surrounds the scene. This is like a part of a book. I enjoyed doing it and I hope you do so. If not, whatever, close this page or read the other things in spanish :)
(Leigh, the most stunning and beautiful foreigner i have known. This is for you ^^ I hope when you read this, you got the joke I tried to do with stunning. Dunno, I'm just a student. I can't make nice jokes I think... Or not. :))

"Second day in that city. Edward and his crew were trying to regroup, but that was an impossible task. There were too many members of the Jonah's gang following them. If they find out that the group is trying to get out of the city, Jonah would definitely kill any of the members with no doubt. Edward was at the north-east, Gerald was at the east, Paulina at the south-east, Lucas at the south, Edgar at the south-west, Liza at the west, Bart at the north-west and Zero at the north. They were surrounding the center, but they were surrounded by unknown enemies. They had to move carefully. Even the less suspicious person can be the messenger. What was the plan to escape the city? Well, I'll explain.

The first step was the most difficult. Liza had to move quickly and deliver the package to the building at the other side of the street, but she got surprised by two members of the Jonah's gang. They grabbed her and started to interrogate Liza, but before she could say any word, a woman touched the two guys and they fell down instantly, even without seeing their "aggressor"

Liza, without time for introducing herself, only said "Thanks." and ran away to her destiny. The first packet was delivered succesfully.

Now, everything was much easier for the group. What does the packet contain? It had a deck from a trading card game. Why was that so important? Edward knows it very closely. If that deck is in the old Edward's hands, it would be a piece of cake to get out of the city. I explain briefly: "Edward has magic powers with cards."

It was the turn of Bart. He is a tough man, so his mission was: throw the package from your position to the north from the roof of your building with all your strength. Then, Zero will grab it and he will run to the north-east point, where Edward was. Bart had an amazing strength and accuracy and Zero caught the package without problems. Then, he ran downstairs, but there were more than five men in front of the exit. That was a problem, but the sticky situation was resolved by the same woman Liza saw before. She looked at the five and then they fell down, like they were stunned. They were too dizzy to even stay standing. Zero was astonished, and he could only see that she had blonde hair before she disappeared.

Finally, Zero gave the package to the old man. Edward, laughing, took the deck and he drew a card.

"Now, it's the time. We're getting teleported outside this jail city. Come on!"

Edward started to use his magic powers and he appeared outside, in the countryside. The rest of the crew was teleported there too. But when they looked around, they all saw the woman that helped both Liza and Zero. Why was she teleported with them? Nobody knows. It is written.
(was that a bad joke? I didn't even realized it when I wrote this)
- Oh, so you are the woman that helped us this time, right? - Said Edward.
- What are you talking about? Why am I here? - Asked the blonde.
- You're here because you wanted it.
- I didn't say anything! I don't even know who you are!
- You'll meet us right now. I'm Edward Yolag. What's your name?
- Leigh. Leigh Myers. Nice to meet you.
- Nice to meet you too. Now I'll show you this. It's a document signed by Mary Lakes. It allowed you to stay with us seven months approximately, but that wasn't possible because we were late to find you. Now, this would be a goodbye, but if you want to stay with us, don't think twice.

Leigh was thinking thoughtfully. Finally, she said:

- It's sad, but I have to go. I don't know you really much but this is the end. Good luck on your journey, Edward and others. Goodbye!

Everyone tried to make a happy ending, but a tear fell from the face of Edgar.

(But that's another story. Wow, this was quite long. I surprised myself. I hope everything is correct. You might not remember me, but I don't care that much as long as you read my story. I'm Benjamin Belmont, from 4A.
"We all will miss you this summer and the next years.")

(And I can be proud of my English level ^^ sorry, my pride went out suddenly.)

(Thanks.)
-Benjamin

viernes, 23 de mayo de 2014

WBG: Paulina vs Neferi, duelo de jardín

Amanece. Todos en la casa de Juanjo Sahim durmieron profundamente. Se levantaron muy temprano dos de las habitantes: Paulina y Neferi. Detrás de la enorme casa, que parecía una mansión sin decorar por fuera, había un enorme jardín con mucho espacio. Eso sería el campo de batalla entre las dos espadachinas. Cuando Paulina llegó, Neferi ya estaba esperándola al lado de los setos.

- La perdedora llega tarde. Je.
- Me harta tu palabrería. Ya verás que quien menos habla, más pelea. - Dijo Paulina.
- Ja. Espero terminar esto antes de 5 minutos. Adelante!

Neferi sacó su espada. Era bastante extraña. Decorada con una calavera en el final de la empuñadura y la hoja de sierra doblada formando un arco color anaranjado. Paulina, a su vez, desenfundaba las espadas de su espalda, que no tenían nada que destacar. Dos espadas contra una. Qué pasará?

Con un grito de batalla poco propio de una chica, Neferi cargó contra Pau. Las dos espadas se cruzaron en el camino del ataque de Neferi, bloqueándolo. Paulina tenía que reaccionar rápidamente. Su rival era más ágil. Pau intentó aumentar distancias y dar un respiro, pero la presión que ejercían los sablazos de Neferi impedían a Paulina hacer otra cosa más que defenderse. Había que intentar cambiar de estrategia.

Paulina pensó un poco mientras se defendía. Lo que tenía que hacer era intentar contraatacar algún bloqueo. En la práctica era complicado intentarlo, pero en uno de esos infinitos choques de espadas, Pau chocó contra un matorral del jardín, esquivando el ataque de Neferi por suerte y pudiendo sacar provecho del terreno, Paulina se ocultó en la espesura que había en aquel lugar.

- Intentando escapar? Ven a luchar, cobarde!

No hubo ni un ruido por los matorrales.

- Agni! Dime donde está! Me estoy impacientando! - Ordenaba Neferi a su espada.
- No se ha movido mucho. Está justo...

Paulina saltó de entre las plantas. Neferi no estaba prevenida, pero pudo esquivar la carga de Pau. Las dos espadas de Paulina volvieron a su espalda y fueron lanzadas hacia su rival. El movimiento no fue tan inesperado para Neferi, que las esquivó sin problemas y las espadas acabaron en el suelo. Pau recordó la situación. Similar a la que tuvo contra Edward. Pero esta vez había aprendido de su error, y tenía un plan.

Ante la desarmada, Neferi aprovechó para intentar finalizar este combate. Con una carga enormemente rápida, acabó en el suelo.

Paulina había tumbado y desarmado a Neferi de una patada en la mandíbula, haciendo que Neferi cayera desmayada. Pau, exhausta, cogió sus espadas y agarró también a Agni, la espada de su rival.

- A ti te he escuchado antes. Habla! - Ordenó Paulina a la espada.
- Grr... Cómo puedo saber que eres mejor que mi antigua ama? - Respondió.

La calavera que decoraba el final de la empuñadura hablaba, teniendo un brillo rojizo. Cosa extraña.

- Mmm... No sé... Porque yo puedo sacar lo mejor de ti?
- Je, me gustaría ver si lo consigues.
...
- Hermanitaa~ - Se escuchó una voz desde otro punto del jardín.
- En serio vas a venir a molestarme ahora? - Dijo Paulina a su hermana.
- Pero si yo no molesto. Yo vengo aquí para matarte porque esta es una inútil.
- Qué dices? Vas a intentar matar de frente a tu hermana mayor? Te has vuelto loca?
- No. Me he vuelto asesina. Un trabajo muy bien pagado aquí. No has visto ningún cartel de "Se Busca"? Soy Laury, el abrazo del corazón.
- Muy interesante. Ahora, sea eso cierto o no, escóndete.
- Por qué debería esconderme?
- Porque tienes alguien a tu espalda.
- Jijiji... Intentas hacerme quedar como idiota? No voy a picar.
- Ves? No has madurado.

Laura fue atrapada por una cuerda extraña color morado. No podía moverse.

- Atrapada, Paulina. - Dijo Edward.
- Sigo sin entender cómo haces esas cosas, pero eres increíble, viejo.
- Pau! Te arrepentirás de esto! Y tú también viejo cabrón! Deberías estar muerto ya!
- Ja, ja... Tienes suerte de que no quiera llevarte a los agentes. Y ahora mismo Juanjo Sahim se ha encargado de ese impostor que nos recibió. Zerofrost se encargó de Seja mientras ella dormía, congelando la puerta. El resto de la "familia" ha dormido profundamente. De eso se ha encargado Lucas. Y cuando digo dormir, quiero decir encerrar en la habitación. Buen plan, pero no lo suficientemente bueno para nosotros.
- Joder! Lo sabíais todo desde el principio? Vaya equipo te has encontrado, hermana! - se quejaba Laura.
- Para ser tan pequeña, ya eres demasiado mal hablada. Quieres que te recuerde los castigos de la escoba de mamá?
- No serás capaz...
- Edward! Te importa bajarle el pantalón a mi hermana? Tengo algo que hacer con esta escoba.
- Sí me importa. No pienso hacer eso. Hazlo tú misma, que quede en familia. - Protestaba Edward.
- Pau! Si yo sé que en realidad no quieres hacerlo! Pau! PAU! NO!!

Golpes de escoba comenzaron a caer sobre el trasero de Laura. La chica lloraba, pero Paulina sabía que este castigo serviría para intentar disciplinar un poco a esta bala perdida que era Laura.

...

- Juanjo. Cuánto tiempo habéis estado secuestrados? - Preguntó Edward.
- Alrededor de 3 meses. Ha sido un sufrimiento. Por lo menos nos daban comida, pero...
- Pero ahora estáis bien. Eso es lo importante. Nosotros nos tenemos que ir. Cuanto antes crucemos el canal, mejor.
- Hasta que nuestros caminos se vuelvan a cruzar, Edward.
- Adiós!

Y así fue la última conversación entre Juanjo Sahim y Edward Yolag. Así acaba este episodio, con espada nueva, escobazos y despedida. Hasta el siguiente.

sábado, 17 de mayo de 2014

WBG: La casa de Juanjo Sahim

- Al fin llegamos! Ya veo la tierra! - Informaba Lucas.

- Por fin! Ya estaba harta de tanta agua. - Decía Paulina.
- Y... dónde nos quedaremos por la noche? No vamos a atravesar el Canal hasta que se haga de día, verdad? - Comentaba Zerofrost.
- Pues no hay problema. Hace mucho, conocí a alguien que vivía por estos lugares. Juanjo se llamaba. Ya tendrá sus años. Puede que incluso haya muerto ya, pero recuerdo su casa. Sus hijas nos abrirán. - Edward daba el discurso que solucionaba el problema, pero no parecía muy creíble. Cosas de la edad del viejo.

Resumiendo, finalmente desembarcaron en Suez. El barco español fue dejado en el puerto egipcio hasta retomar el viaje. Descansarían una noche allí. Tuvieron que caminar un buen rato por la oscuridad hasta encontrar la casa de Juanjo Sahim. Llamaron a la puerta sin hacer demasiado ruido. Ya había pasado la medianoche. Una chica abrió lentamente la puerta.

- Sí?
- Hola, Katie. Soy Edward Yolag, me recuerdas?
- Esto... No, lo siento.
- No pasa nada. Puedes llamar a tu padre un momento?
- Ahora mismo. Le diré su nombre.

Unos segundos después...

- Edward? Amigo! Cuánto tiempo! Qué te ha traído aquí? - Dijo Juanjo en cuanto llegó.
- Pues nada, tenemos que hacer un largo viaje y vamos a parar aquí. - Contestó Edward.
- Pero bueno, pasad, pasad. Sentíos como en casa.

La casa era inmensa. Parecía una mansión pero sin muchos lujos. Grande, pero sencilla. Cuando los cuatro del grupo entraron, tuvieron una cálida bienvenida de parte de cinco muchachas y la, al parecer, mujer de Sahim. Este recibimiento acompañado de la luz amarillenta y tenue que iluminaba el gran salón. Una gran alfombra típica de aquella parte del mundo cubría gran parte del suelo. Todos se sentaron alrededor de una gran mesa, utilizada para comer, pero eso no era lo que iban a hacer los visitantes. Estaban cansados de navegar y buscaban dormir. Sin embargo, se sentaron y charlaron unos con otros.

- Bueno Juanjo! No ha cambiado nada esto, verdad?
- Pues en realidad sí. Ahora estoy acogiendo a algunos visitantes a cambio de un poco de dinero. Me hace falta, la verdad. Ahora mismo están durmiendo. Un hombre y una muchacha.
- No pensarás cobrarnos a nosotros, verdad?
- Ni hablar! Podéis quedaros gratis incluso más de cinco meses! Un amigo lejano es un tesoro escondido. Ya lo dijo el sabio Kilik.
- Eso es un gran amigo! Eres el mejor, Juanjo!



- Psst. Oye, tú.
- Qué?
- Pareces una chica bastante fuerte. Se te nota en la cara. - Decía la que había susurrado a Paulina.
- En serio? Gracias, supongo.
- Sabes? Yo soy la mejor hija de Sahim, Neferi. Y cuando veo que alguna arpía me quiere quitar el puesto, tengo que retarla.
- Pero... Yo no quiero quitar ningún puesto! Si nos vamos mañana!
- Eso es una excusa. No se aceptan las excusas en la familia. Mañana, cuando salga el sol, nos vemos en la puerta. Si no vienes, me encargaré yo de que no salgas más allá de Egipto.
- (Pero a esta tía qué le pasa? Tiene el ego demasiado subido...) Qué le voy a hacer. Está bien. - suspiraba Pau, sin ganas de discutir.
- Más te vale estar preparada. No podrás vencerme.



- Perdone, es usted Zerofrost?
- Eh? Sí. Cómo sabe usted mi nombre?
- He leído bastante sobre las leyendas. Nunca creí que iba a encontrarme con el hombre exacto a la descripción de la leyenda de Noui.
- Pues... encantado, supongo. Su nombre?
- Seja. Encantada.

Más vale que el grupo tenga cuidado. Es posible que engañen a más de uno del grupo. Cómo conocen el nombre de Zero? Y por qué han retado tan de repente a Paulina sin ninguna razón lógica? Eso será en el próximo episodio.

- Pero qué es este alboroto, Juanjo...? Un segundo. - Dijo la mujer que había entrado en la sala.
- (Esa voz...) - Pensó Paulina
- Hermana! En serio? Pau! Qué estás haciendo aquí?
- Tengo que viajar hasta...
- Anda! En serio es esta tu hermana? - Interrumpió Edward.
- Sí. Me llamo Laura. Laura Gao. - Contestó ella.
- Entonces, el apellido de nuestra Pau es... - Continuó Edward.
- Sí. Me llamo Paulina Gao, y qué? Te hace gracia?
- No, por favor. Solo recordaba a alguien con ese apellido.
- Pues me lo cuentas mañana. Voy a descansar. Lauri, vente para que hablemos un rato. Quiero saber de ti.
- Y yo de ti, Pau. Ya verás.

Unos minutos más tarde, en la sala de invitados...

- Y Pau... Por qué tienes que viajar?
- Pues...

Se escuchó la tos de Edward desde el otro lado de la puerta, interrumpiendo adrede a Paulina.

- Creo que no puedo decírtelo.
- Por qué?
- Cosas de trabajo.
- Eso decías tú siempre. Colaba hasta que terminaste de estudiar!
- Laura! Qué te pasa? Estoy cansada, vale? Llevo más de diez días en un barco aguantando a esos dos tipos y al viejo. No puedo con mi alma...
- Venga, ahora dímelo.
- El qué?
- Quién de los tres es tu novio?
- Pero qué dices? No soporto a ninguno de ellos.
- Ya me enteraré yo antes de que te vayas, tranquila. No te vas a ir sin yo saber qué estás haciendo.
- Bueno, suerte con tu búsqueda. Se ve que no tienes otra cosa que hacer. Ahora me toca a mí. Por qué estás aquí?
- Me fui de casa.
- Pero tan lejos?
- Bueeeno... un hombre tan majo como es el dueño de esta casa me acompañó desde España.
- Y te fiaste de un extraño?
- Me propuso una oferta muy buena. Yo ya me había ido, así que no podía decir que no.
- Cuál era esa oferta?
- Ups. No puedo decírtela.
- Ya estamos. Qué rencorosa eres...
- Pues haberme dicho tú lo que tienes que hacer. Es el marinero, verdad?
- Que no!
- Te estás poniendo roja!
- Pero eso es porque me estás poniendo nerviosa!
- Nerviosa? Por qué? Porque estoy acertando, verdad?
- Mira, como sigas voy a perder la paciencia. Qué poco has madurado.
- Tú apenas tienes diecinueve!
- Pues hala, tu hermana mayor tiene el derecho de mandarte a la cama. Buenas noches. Mañana me despediré.
- (Si puedes, hermanita)
- Has dicho algo?
- S-Sí! Buenas noches, Pau. Que sueñes con él.
- Qué asco de hermana menor!

Cuánto diálogo, verdad? No problem, estaba inspirado para hacerlo el día que escribí. Espero no pasarme muchas veces de texto, aunque quiero hacer las cosas más largas.


sábado, 10 de mayo de 2014

WBG: España-Japón, desembarcando.

- Lucas, tú cómo sabes tanto sobre barcos? - Preguntó Zero.
- Estuve tripulando uno hace tiempo. Aprendí todo lo que necesito para mover un barco.
- Espero que no acabemos hundiéndonos. - Decía Paulina, que todavía no se fiaba mucho de Lucas.
- Cállate, a ver si te voy a tirar por el tablón sin querer.

- Edward! Qué estás haciendo?
- Estoy haciendo cartas! Ahora no puedo!
- Cartas de navegación? Sabes hacerlas?
- No son cartas de navegación! Son cartas de juego! - Contestaba Edward desde la habitación.
- Ah... vale...

- El mago, el viejo chalado y el marinero gilipollas... Vaya equipo tengo... - Pensaba Paulina.
- Pues tan chalado no estaré. Estoy entrenando mientras subo de nivel mi profesión de inscripción. - Dijo Edward.
- Otra vez leyéndome el pensamiento? Cómo lo haces?
- "Se puede fingir todo lo que quieras, pero una mirada siempre lo confesará todo." Eso lo dijo uno de mis instructores. Nunca tuvo más razón.
- Otra vez con las miradas. Yo no me lo creo. Ya no puedo ni pensar en privado.
- Ja, ja... Relájate. Disfruta del sol. Todavía quedan unos cuantos días para llegar a Egipto. Dónde pararemos, Lucas?
- Creo que vamos a parar en Suez. - Contestó Lucas - Utilizaremos el canal de Suez para entrar al Mar Rojo y llegar por el Índico a la India. Desde allí, viajaremos por tierra atravesando China hasta Shanghai. Desde allí, llegaremos a Japón.
- Bueno, me consuela que por lo menos sabemos la ruta más corta. - Suspiraba Paulina.
- Que te consuela? Tú lo que quieres es que yo te consuele. - Dijo Lucas riendo.
- Buscas la mínima para cambiarlo todo de contexto. Ya no te hago caso. Voy a tomar el sol. Avisadme en una hora y media. - Sentenció la muchacha.

...

- Me pregunto dónde estará Lin ahora mismo. - Pensaba Edward en voz alta.
- Lin? Y esa quién es?
- Una chica que nos acompañaba antes de entrar en este juego. Sabía mucho de artes marciales.
- Ah. Vale...
- Voy a seguir haciendo cartas. Zero! Deja de mirar a Pau, que se te van a gastar los ojos!
- No la estoy mirando!
- Ja, mentiroso. Qué le voy a hacer. Este barco está lleno de pervertidos. - Terminó Paulina.

Y con el clima soleado que caracterizaba el Mar Mediterráneo, un viaje en barco y un misterio sobre Lin, que no ha aparecido por ningún sitio, terminamos este capítulo que rellena un poco y me aclara las ideas. Si tengo estos pequeños detalles, se me pueden ocurrir más cosas nuevas. Gracias por leer y seguir mi blog cada sábado. Hasta el siguiente!

WBG: Antes de llegar, la historia de Liza.

El tercer día viajando se hizo monótono y aburrido para todos. La ruta por los campos alemanes no tiene ningún tipo de entretenimiento, así que descansaron mientras llegaban a su destino.

- Qué estará haciendo mi padre ahora? Por dónde irán? - Se preguntó Nevan en voz alta.
- Probablemente casi llegarán a Egipto, preparándose para cruzar el canal de Suez.
- Tienes un mapa?
- Sí.
- Préstame eso.

Nevan estuvo observando un rato el mapamundi. Estaba buscando hasta dónde tenía que viajar Edward.

- En serio tienen que llegar a esa isla alejada de todo? - Preguntó sorprendida Nevan.
- No sabías dónde estaba Japón?
- No. Yo no he estudiado apenas aquí. Lo que sé, lo aprendí en el infierno.
- (Y lo dice como si fuera algo normal...) - Pensaba Gerald.

- Por qué no le envías un mensaje? - Propuso Liza.
- Cómo? Se puede?
- Claro! Recuerda que esto es un videojuego! Puedes mandar mensajes a quien tengas en tu lista de amigos.
- Voy a ello ahora mismo!

Nevan aprendió a enviar mensajes. Tardó unos minutos en llegar hasta Edward, pues la distancia hace que se retrase el texto. El viejo leyó lo que Nevan contaba y contestó.

- "Estamos en el barco todavía. Tenemos pensado llegar a Suez en dos días más. Allí pararemos un par de días y continuaremos cruzando el canal en barco, el mar rojo y el índico, hasta llegar a la India, que la cruzaremos por tierra hasta China. Tras esto, cruzaremos gran parte de la Gran Muralla para acabar en Shanghai, una ciudad costera que nos llevará en barco hasta Japón. Tardaremos bastante en llegar, pero yo ya tengo mi entretenimiento. Estoy en el barco fabricando cartas. Sí, como las que hacía Ed Guardiola, pero estas son diferentes. Tengo tiempo de sobra para crear una baraja de cartas bastante interesante. Y en Japón se vende de todo, ja ja. Ese es el trayecto que vamos a seguir. Mientras tanto, espero que estés bien. Y que todos los demás también lo estén. Suerte con vuestra misión. Sé que tú dirías lo mismo."

- Bueno, me alegra saber que siguen bien.
- Qué aburrimiento. Cómo pasábamos antes los ratos de espera? - Se quejaba Bart.
- Es verdad! Contábamos nuestra historia! - Recordó Gerald.
- Y Liza es la nueva. Vamos a ver qué nos cuenta, verdad? - Sonreía Nevan.
- Eh... qué...? Cómo...? - Liza no sabía por dónde meterse.
- Que cuentes lo que recuerdes sobre ti y tu pasado. Eso es lo que hacíamos. - Explicó Nevan.

Liza entonces, tras acceder y pensar un rato, comenzó a contar su historia.

Yo nací cerca de los Pirineos. Mis padres estaban de vacaciones por el embarazo de mi madre, que era actriz de teatro y algo de cine. Mi padre había pedido la baja. Él era bibliotecario. Crecí en Málaga, una ciudad del sur de España. Siempre he tenido ganas de ir a Francia y mira, en este juego he podido hacerlo. Aunque sea virtualmente, pareció real. Cuando acabé de estudiar, ayudé a un amigo ejerciendo de abogada defensora. Entonces supe que tenía que estudiar derecho. Eso hice. Ahora mismo, estáis ante la letrada Liza Carr. Aprendí a manejar la espada desde adolescente. Me gusta mucho Francia, y esa era una de las cosas que me acercaban al país. Ahora me ha tocado viajar con vosotros. Qué cosas. Me lo estoy pasando bastante bien.

- ... Has acabado? - Preguntó Bart.
- Esto... sí.
- Pues eres la más normal de aquí. - Afirmó Nevan.
- Cómo?
- Deja que te contemos nuestras historias, anda. Fliparás. - Terminó Bart.

Hasta aquí el episodio y el viaje de este primer grupo de cinco personas. Ya estaban a punto de llegar, así que... vamos a saber qué les pasará a los otros cuatro. El viaje a Japón es muy largo. Habrá que invertir varios capítulos. Mientras tanto, nos vemos en el siguiente!

sábado, 3 de mayo de 2014

Comentario de Autor #1

Bien. Soy YormungandSnake, Benjamín, Edward Yolag... lo que prefieran. Soy el que escribe estas historietas aleatorias en mi tiempo libre. Quería hacer una sección para comentar un poco los últimos capítulos que he subido, porque a veces me gustaría explicar algunas cosas. Para las que no explique, echadle imaginación, que ejercitar la imaginación es algo importante, aunque sin pasarse. :)

A lo que iba. Primero: ¿Por qué el episodio de relleno de la ducha? Bien, el día que me puse a pensar sobre los futuros episodios, mis amigos y yo tuvimos una larga discusión sobre duchas. Entonces mi cabeza pensó en ponerlo en el episodio. La relación entre Edgar y Liza existió, pero ahora ya no son "novios" (o eso es lo que creo yo, porque no me quieren informar bien xD). Lo más curioso es que quizás Edgar y Julia, que estaban en PpA, siguen en contacto. Pero como a mí no me interesa meterme tan a fondo en esas cosas, no tengo más información.

Os habréis dado cuenta de que he dicho "la relación entre... existió". Eso significa que casi cada uno de los personajes están basados en mis compañeros/amigos, pero con nombres cambiados o distorsionados. Creo que ahora mismo el único personaje que no está basado en ningún conocido mío es Nevan, cuyo nombre saqué de otro videojuego: Devil May Cry 3. Se merece la mención especial, puesto que fue lo que me dio la idea.

Hasta aquí el comentario. Espero que los que vengan sean tan largos como este, porque no me esperaba que ocupara tantas líneas un simple comentario corto. Espero que lo paséis bien con la sección que estoy preparando. Creo que es mejor describir físicamente un poco a mis personajes, porque no lo he hecho en ningún momento. Probablemente suba esas descripciones otro día que no sean sábado, así que atentos a los capítulos, porque puedo poner más información sobre esta posible nueva sección, además de que igual pongo la publicidad de google activada dentro de poco. No sé, nada es seguro, así que... Gracias por las visitas, lectores! Yo tengo ilusión en estas historias. Espero que no se me acaben las ideas hasta dentro de mucho! Hasta la próxima!

WBG: Liza Carr vs Thomas Marlot

Era ya entrada la mañana cuando llegaron Edgar, Bart, Nevan y Liza a la academia de esgrima en Lyon. El hombre viejo de ayer los recibió y los invitó a pasar. La "arena" estaba preparada, y el contrincante de Liza estaba listo.

- Buenos días, madame. Permítame presentarme. Mi nombre es Thomas Marlot, profesor de esta academia. Tómese el tiempo que necesite para prepararse.
- Muchas gracias, caballero. Yo me llamo Liza Carr, encantada. Ahora mismo me preparo.

Los alumnos estaban sentados alrededor de la sala donde iban a batallar, esperando un combate muy reñido. Los visitantes se sentaron donde pudieron. Liza estiraba sus músculos antes de comenzar. Toda la sala rebosaba de expectación silenciosa. El mediador, que era el hombre que invitó a Liza, iba a dar comienzo al duelo.

- Muy bien. Están listos?
- Por supuesto, Bertrand. - Contestó Thomas.
- Sí. Lista. - Afirmó Liza.
- Pues... Que comience el duelo!

Ambos prepararon a conciencia la posición de sus piernas. Lo más importante para evitar ser sorprendido en el primer ataque era la correcta reacción de los pies. Liza conocía muy bien este paso, así que ella fue la primera en atacar. Thomas, siendo el maestro, no iba a ser menos y esquivó el ataque principal. Pero eso no era todo. Liza había preparado un ataque en dos partes, así que Thomas tuvo que retirarse unos pasos para evitar ser dañado por su rival con el segundo ataque. Liza estaba más tranquila ahora. Había probado un poco las habilidades de su contrincante y vio que él iba a jugar defensivo. La esgrimista volvió al ataque poco tiempo después. Intercambió unas cuantas estocadas con Thomas y finalizó la primera ronda con un ataque en diagonal de abajo a arriba tras una pausa en esa acción. Thomas quedó sorprendido con la habilidad de la muchacha. Había perdido la primera ronda, pero eso a él no le importaba. Todavía tenía posibilidades.

- Impresionante, Liza. Sin duda una gran rival. Aprended, alumnos! Prestad mucha atención a esta batalla.
- Muchas gracias por los halagos. En guardia!

- Segunda ronda! Adelante! - Gritó el mediador.

Liza volvió a atacar primero, pero esta vez el ataque no fue esquivado, sino bloqueado con el estoque de Thomas. Liza procuró apartarse de su contrincante para evitar dejarlo en una situación ventajosa, pero Thomas fue más rápido y sorprendió a Liza bloqueando con una zancadilla el pie izquierdo de Liza mientras se apartaba. La muchacha cayó y Thomas apuntaba al cuello de la chica con el estoque. Había ganado Thomas rápidamente esta vez.

- Pero eso está permitido? - Preguntaba Edgar.
- Sí. No lo vi venir. Es bastante bueno. Tranquilo, que la última la gano yo. - Contestó Liza.

- Preparados? Ya!

Liza esperó esta vez a que su contrincante atacara primero. Thomas no estaba jugando agresivamente, pero el primer ataque fue suyo esta vez. Liza aprovechó para desplazar su peso hacia la derecha y, esquivando el primer ataque, intentar confundir la vista de Thomas. Desafortunadamente, Thomas saltó hacia atrás y deshizo todo el plan de Liza. La chica, tratando de terminar con el combate, flexionó sus piernas e intentó dar una estocada recta desde la posición donde ella estaba. Cuál fue su sorpresa cuando vio desaparecer a Thomas Marlot ante sus propios ojos, quedando a merced del estoque del francés.

- Creo que la victoria es mía esta vez, madame.

Liza tenía los ojos como platos. Paralizada totalmente y con una espada cerca de su cuello. El público no había visto el movimiento de Thomas. Literalmente, había desaparecido. Liza logró decir unas palabras.

- Eres bueno. Tengo que decir que he aprendido mucho hoy. Ya verás que algún día seré mejor que tú. Tenlo por seguro.
- Jaja... Bien dicho. Veis su motivación, alumnos? Aprended de ella. Ese es el espíritu.

Se despidieron de todos y la academia dio gracias a Liza y los demás por su asistencia. Cuando volvían al albergue, Edgar preguntó algo a Liza.

- Oye, Liza. Ese tío... cómo hizo la última jugada?
- Me gustaría saberlo. De todas formas, gracias.
- Gracias? Por qué?
- Por interesarte en el combate.
- Eh? Pues claro que me intereso. Eres mi compañera, al fin y al cabo.
- Cierto.

Entre esa y otras conversaciones, acabaron la mañana. Gerald ya esperaba en el carro a los demás y partieron en cuanto estuvo todo listo. El próximo día, ya estarían en Alemania.

WBG: La ducha de noche

La noche caía mientras se preparaba la primera ducha para Liza y Nevan. Cuando cerraron la puerta del cuarto de baño, ocurrió una escena un tanto... extraña.

- Ah!
- Qué pasa!? - Preguntó Nevan tras el pequeño susto de Liza.
- N-Nevan... Tienes... Alas?
- Cómo? Alas? Qué dices? - Dijo mientras palpaba su espalda, sorprendiéndose de que Liza tenía razón.
- M-mira... prefiero dejar la ducha para más tarde, sabes? - Decía asustada - Creo que mejor te quedas tú aquí y luego ya...
- Liza.
- Dime?
- Soy un súcubo.
- Quéeee?
- Sí, soy un demonio. No se lo digas a nadie, vale? No quiero que se sepa demasiado sobre ello.
- No se lo diré a nadie, p-palabra! - Seguía temblando Liza.
- Es extraño. Hasta ahora había podido ocultarlas siempre. Por qué ahora no puedo?
- Yo no sé nada. No entiendo...
- Entramos ya al agua? La dueña se enfadará con nosotras si tardamos mucho.
- B-bueno, vale... pero...
- Tranquila, los súcubos no atacan a las mujeres. Jiji...
- (Eso no me deja más tranquila. Eso significa que ataca hombres!?) - Pensó Liza mientras daba un suspiro, entrando tras Nevan al agua.

Durante el baño, Nevan quería hablar con Liza.

- Oye... Liza. Quería preguntarte algo.
- Dime. - Liza ya estaba más calmada tras el shock.
- Te gusta Edgar?
- Qué? Nah, para nada. - Se apresuró a contestar Liza.
- Yo no estaría tan segura de ello.
- Vas a decidir tú quién me gusta o quién no?
- Yo sé que él te quiere.
- Venga ya. Cómo vas a saber eso?
- Recuerda que soy un súcubo.
- No, por favor... quiero olvidarlo...
- Tú sientes algo por él, estoy segurísima.
- Dale con lo mismo...
- Me lo puedes decir. No se lo contaré a nadie.
- Pero si te estoy diciendo que no!
- Andaaaaa... Porfaaaaa...
- Pareces una niña pequeña.
- Bueno, tendré que seguir intentándolo más adelante. Conseguiré que lo digas. Palabra.
- Vaya compañera me ha tocado... - Murmuraba Liza.

Finalmente, cuando acabaron las mujeres su ducha, los otros tres ya decidieron qué hacer. Edgar y Bart se ducharían por separado y Gerald se ducharía mañana, perdiéndose el combate de esgrima de Liza. No le importaba demasiado, así que quedaron de aquel modo. Mañana sería un día movidito.